El peeling superficial, tal y como dice su propio nombre, actúa a nivel de epidermis por lo que se convierte en una exfoliación menos agresiva (puede llegar hasta la dermis papilar con una profundida máxima de 0.06mm). Se suelen realizar tras una limpieza de la piel, donde el dermatólogo o el profesional, aplica el agente químico dependiendo del tipo de piel del paciente y de la patología cutánea que tenga.
Está indicado para todos los fototipos de piel, para el acné, el melasma epidérmico y el fotoenvejecimiento. Los principios activos más comúnes que se usan en este tipo de peeling son:
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Ácido glicólico (es un alfahidroxiácido y se emplean concentraciones entre el 50% y el 70%)
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Ácido salicílico (a concentraciones generalmente bajas)
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Pasta de Unna conocida como Resorcinol
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Ácido tricloroacético (se emplean concentraciones entre el 10% y el 25%)
Además de estos 4 básicos, también se utilizan para el peeling superficial soluciones mixtas como la de Combes-Jessner que contiene una mezcla de ácido salicílico, recorcinol y ácido láctico.
Resultados mediante el empleo del Peeling Superficial
El ácido salicílico, si la persona no presenta ningún tipo de alergia a éste, se recomienda a personas con piel grasa o tendencia acneica ya que es muy liposoluble, con lo que se disuelve muy bien en grasa o medio oleoso. Cabe decir, que a nivel tópico y pequeñas dosis el ácido salicílico puede emplearse en personas sensibles por via oral pero esto es algo que debe valorar muy bien el médico antes de proceder.
Una complicación que aparece con frecuencia es la aparición de una pigmentación o variación del color en la piel que puede ser permanente o transitoria. Suele ocurrir en personas con fototipos altos y para evitar que esto ocurra hay que prevenir mediante la fotoprotección antes y después del peeling, y en casos puntuales, también se puede iniciar un tratamiento médico con productos despigmentantes. Recordamos que este tipo de peeling no sirve para cicatrices ni arrugas.
Lo que no se recomienda salicílico e incluso ácido glicólico es para las pieles oscuras o negras ya que puede provocar pequeñas decoloraciones. De todas formas, tras el tratamiento el paciente observará un enrojecimiento de la zona y una sensación de quemazón o quemadura solar durante los tres o cuatro días en los que su piel se irá descamando.
RECUERDE QUE ANTES DE APLICAR UN TRATAMIENTO DE PEELING SUPERFICIAL NO DEBE TOMAR EL SOL DURANTE 3-4 DÍAS, Y POSTERIORMENTE AL TRATAMIENTO DEBERÁ ESPERAR AL SEGUNDO MES POR RIESGO DE ALTERACIONES PIGMENTARIAS O DE COLOR.